La espelta es una harina de trigo que se cultiva desde hace 7000 años, y es considerada como el origen de todo el trigo que se consume hoy en día.
La espelta, también conocida como escanda o trigo salvaje, ha estado a punto de desaparecer ya que no era tan productiva como otras variedades de trigo, pero cada vez más consumidores eligen productos elaborados con este tipo de harina, debido a las propiedades nutricionales que tiene. Algunos beneficios de la espelta son:
- Contiene los 8 aminoácidos esenciales y todas las sales minerales.
- Es especialmente bien digerible, y ayuda a mejorar problemas intestinales, estreñimiento, obesidad… debido a su alto contenido en fibra.
- Ayuda a reducir ataques de migraña debido a que es rica en hierro y en vitaminas E, B1 y B2.
- Ayuda a combatir el estrés debido a su contenido en magnesio (0,15%).
- Ayuda a fortalecer los tejidos y refuerza el sistema inmunitario y circulatorio debido a su contenido en ácido silícico y zinc.
- No contiene colesterol y es rica en ácidos grasos esenciales (ácido oléico y ácido linoléico).
- Ayuda a combatir el insomnio.
- Tiene muchos beneficios contra los factores de riesgo cardiovascular debido a su alto contenido en niacina, vit. N3.
- Tonifica el bazo y el páncreas.
La espelta, igual que el trigo común, se utiliza para elaborar harinas, pan, bizcochos, galletas, pizza, cerveza, sémolas…
Por lo que parece, todo son beneficios si se utiliza esta harina, por eso yo ya he probado a hacer un bizcocho con harina de espelta.
