En anteriores ocasiones ya he comentado la importancia de comer productos de temporada. No solo porque estos están en su momento óptimo, sino porque además supone un ahorro para nuestra economía.
Al igual que hice con los productos de otoño, ahora le toca el turno al invierno.
La temporada de invierno en el hemisferio norte del planeta va del 21 de diciembre al 21 de marzo. Aquí tienes una lista de los productos de esta temporada. Muchos llevan enlaces a recetas que usan esos productos:
Verduras y hortalizas: acelga, ajo, alcachofa, apio, berenjena, brócoli, calabacín, cardo, col, coliflor, col lombarda, endibias, escarolas, espinacas, guisantes, judías tiernas, lechuga, nabo, patata, pimiento, puerro, rábano, remolacha, tomate y zanahoria.
Frutas: caqui, chirimoya, fresas, granada, kiwi, limón, mandarina, manzana, naranja, olivas, plátano, pomelo y uvas.
Frutos secos: castañas, nueces, pasas y piñones.
Legumbres y cereales: habas, garbanzos, lentejas, maíz y guisantes.
Pescado, moluscos y crustáceos: almejas, anguila, angulas, bacalao, berberechos, buey de mar, besugo, caballa, cabracho, camarón, carpa, cigala, congrio, dorada, gallo, gamba, fletán, lamprea, langosta, liba, lubina, mejillones, mero, navaja, nécora, ostras, palometa, perca, percebes, pulpo, salmón, salmonete, tiburón, trucha, vieiras y zamburiñas.
Carnes y huevos: becada, cabrito, capón, cerdo, cerdo ibérico, ciervo, cochinillo, codorniz, conejo, ganso, jabalí, lechón, liebre, paloma, pavo, perdiz, pintada, pollo y pato.
Pingback: 10 puntos para comer barato y sano | ampliable.com